La onicogrifosis es una patología ungueal que provoca el engrosamiento excesivo, endurecimiento y curvatura anormal de la uña, dándole un aspecto de "cuerno" o garra. Puede estar causada por traumatismos, envejecimiento, infecciones fúngicas o alteraciones vasculares, y es especialmente frecuente en personas mayores o con patologías crónicas.
En nuestra clínica tratamos la onicogrifosis mediante la deslaminación mecánica segura y controlada, con instrumental profesional y bajo condiciones de esterilidad. El objetivo es reducir el grosor, aliviar molestias al caminar, evitar lesiones en la piel adyacente y mejorar la estética de la uña. Además, si hay causas asociadas como hongos o problemas circulatorios, se abordan de forma conjunta para prevenir su reaparición.
Puede deberse a traumatismos, presión crónica, infecciones fúngicas, mala circulación o envejecimiento.
Se puede tratar y controlar, pero si hay factores persistentes, puede volver a aparecer. El seguimiento profesional es clave.
No, la deslaminación se realiza con instrumental preciso y sin dañar el tejido circundante.
No se recomienda, ya que puede causar heridas o infecciones. Es necesario tratamiento podológico especializado.
Puede seguir creciendo de forma anómala, generar dolor, infecciones o deformaciones permanentes.
Es más frecuente en personas mayores, pero puede presentarse en cualquier edad si existen factores predisponentes.
No siempre. Solo si hay infección fúngica u otra causa específica que lo requiera.
Sí, además de aliviar molestias, permite una mejora visual significativa de la uña tratada.
